Oleg Krot, socio gerente del holding internacional TECHIIA
Este texto pudiera resumirse dos tesis cortas: "Haga lo mejor que pueda" y "Crea en las Fuerzas Armadas". Pero quiero destacar unos cuantos puntos específicos más.
Como resultado de la guerra iniciada por Rusia, el mundo entero ha cambiado drásticamente, y los negocios ucranianos aún más. El tiempo de prestación del servicio ha aumentado mientras que los ingresos han disminuido, los empleados se han encontrado en diferentes partes del mundo y el Estado ha ido generando nuevas reglas todos los días.
Todos tenemos que resolver muchos problemas y tomar decisiones manteniendo la cabeza fría, abstrayéndonos de las emociones fuertes. Además, los empresarios luchan a diario con las presiones sociales, que incluyen los incompatibles "impulsar la economía" e "ir a la guerra".
Yo quiero hablarle sobre las dos tareas complementarias prioritarias del empresario ucraniano.
Tarea 1 – Ayudar a Ucrania
Después del ataque de las tropas rusas a Ucrania, mi agenda, como la de todos los hombres de negocios, cambió drásticamente. Antes trabajaba doce horas al día, ahora trabajo veinte. La mayor parte del tiempo lo dedico a resolver problemas que no conciernen directamente a la empresa. Porque si no ayudamos a Ucrania a salir de los horrores de la guerra hoy, es posible que Ucrania no exista mañana.
Durante las primeras tres semanas, no hice ningún negocio. Usé mis habilidades para ajustar los procesos de asistencia. Mi papel como socio líder es la estructuración legal, la entrada a nuevos mercados, es decir, la cooperación continua con los socios. Así que hice lo que mejor hago, solo que esta vez la tarea era recaudar fondos y suministrar municiones y equipamiento a nuestros defensores.
Yura Lazebnikov y yo hicimos las primeras contribuciones nosotros mismos: proporcionamos más de 200 millones de UAH de nuestros fondos para dar el ejemplo. Hemos estado practicando este principio de caridad durante muchos años y nunca habíamos preguntado si alguien quería unirse a nuestras iniciativas caritativas. Tales solicitudes hacen que una persona se sienta incómoda. Pero la invasión rusa cambió mi posición.
Utilicé diferentes formas de recaudar fondos. Por ejemplo, una vez invité a varios socios a una conferencia de Zoom a la que asistieron periodistas. No sé cómo habrían respondido los multimillonarios a la llamada de ayuda si hubiéramos hablado sin testigos. Y entonces entendieron que los resultados de la reunión podrían ser publicados, así que donaron algunas cifras grandes.
Normalmente, nunca habría hecho eso, pero la guerra abolió muchas de las reglas habituales: hay decenas de miles de vidas en juego. Después de cada reunión me disculpaba, pero enfatizaba que las donaciones ayudan a salvar muchas vidas. Creo que muchos han pasado por esto.
Desde el comienzo de la invasión, muchos empresarios ucranianos han ayudado al ejército y a los civiles. Involucraron todas sus habilidades y contactos. Sí, se verían espectaculares con una ametralladora en el puesto de control, pero luego cientos y miles de otros soldados no recibirían chalecos antibalas y cascos, y mucho menos cámaras termográficas y drones.
Un negocio internacional tiene un papel especial. Durante la guerra, se convirtió en uno de los pocos canales que aún sigue atrayendo fondos a Ucrania, dado que muchos de nuestros oficiales no saben inglés.
Nadie puede siquiera estimar cuántas vidas salvaron los empresarios ucranianos que sacaron dinero de sus bolsillos y recaudaron millones de dólares a través de socios humanitarios para iniciativas humanitarias.
Pero hay un peligro. Muchos ucranianos lo enfrentaron. Aquellos que en los primeros días, semanas o meses agotaron todas las reservas posibles, en algún momento se dieron cuenta de que no había con qué reponerlas. Así que decidí no ir por el mismo camino, ya que no tendría con qué brindar ayuda.
TECHIIA cuenta actualmente con un equipo independiente de 30 personas involucradas en suministros, además de voluntarios, algunos de los cuales viven en Europa. Sí, incluso hoy en día, a veces trabajo como humanitario: por la burocracia, problemas con las transferencias o errores en los documentos que provocan demoras en la aduana. Pero mi competencia clave es generar ideas de negocio, marcar el vector de desarrollo y saturar de dinero a las empresas. Esto nos lleva al segundo punto.
Tarea 2 – Salvar la empresa e incrementar su eficiencia
Me gustaría enfatizar que respeto profundamente y apoyo la decisión de los compañeros empresarios de defender su país con las armas en la mano. Lo que no apoyo son los llamados masivos a dejarlo todo y pasar al frente. Especialmente si el destino de decenas, cientos o miles de empleados depende de usted.
Durante la guerra, el negocio cambia a los mismos rieles que el ejército, fortaleciendo el control vertical, reaccionando rápidamente a los cambios y reactivando las reservas (si, por supuesto, tiene alguna). El propietario es el comandante en jefe y los altos directivos son generales. Juntos, forman la columna vertebral del negocio, fortalecen al equipo y marcan la dirección, incluso en una situación de total confusión.
Esto es lo que hicimos en el holding al comienzo de la invasión: ajustamos el sistema a esta realidad turbulenta. Algunos especialistas clave han tenido que ser evacuados, como los que se relacionan con los bancos. Esto fue difícil porque algunos no querían irse. Era necesario explicar que el trabajo que realizan es crucial, y permaneciendo bajo fuego, limitados en la acción, trabajarían de manera ineficiente.
La eficiencia es la característica más importante de un especialista y una empresa durante la guerra. ¿Qué tipo de eficiencia puede haber cuando tus emociones se disparan y las personas que te rodean mueren? En esos momentos, es necesario recordar a las personas cuál es su superpoder para que dejen de sentirse culpables y comiencen a hacer lo que mejor saben hacer. Lo mismo va para usted también.
Puede estimular la eficiencia de diferentes maneras. Alguien necesita un ambiente tranquilo para trabajar al máximo, alguien necesita asegurarse de que sus seres queridos estén a salvo. Todos tienen una comprensión clara de su lugar en la cadena de beneficios.
Vimos el resultado al instante. Por ejemplo, nuestro CFO solía hablar con bancos extranjeros en Kiev, pero ahora se reúne con ellos en persona en el extranjero, lo que acelera y simplifica la apertura de cuentas y las transferencias internacionales, incluidos los fondos de ayuda humanitaria que pasan por nuestra ONG Techiia Foundation. Entonces, debido a las circunstancias, logramos incorporar el principio "Conozca a su cliente" al máximo.
Todos tenemos la tarea de apoyar al máximo la capacidad de las empresas y así acercar la guerra a su fin. Una empresa autosuficiente genera impuestos que financian a las Fuerzas Armadas. Paga los salarios que los empleados gastan en mantenerse a sí mismos y a sus familias, invirtiendo en el presupuesto local, donando para una cámara termográfica para un amigo o rescatando mascotas abandonadas.
Existe la creencia extendida de que el patriotismo se manifiesta en la capacidad de sacrificarse por el bien de los demás. En mi opinión, esta no es de ninguna manera una definición completa. El sacrificio personal es una cualidad que puede ayudar a ganar una batalla, pero no una guerra. Para ganar se necesita el trabajo coordinado de personas que sepan hacer bien su trabajo.
Y después de la victoria, todavía tenemos que reconstruir. Tenemos que pensar en esto ahora. Sobre cómo crear infraestructura, desarrollar la economía y acumular inversiones, en cooperación con las autoridades para desarrollar nuevos mecanismos fiscales que nos permitan atraer fondos rápidamente de todo el mundo.
Si cree que después de nuestra victoria podemos sentarnos y relajarnos mientras todo el mundo comienza a inundar Ucrania con dinero, bueno, piénselo de nuevo. Solo un socio fuerte es respetado y apoyado. Fuerte tanto militar como económicamente. El primer punto ya ha sido probado por nuestras Fuerzas Armadas. El segundo punto debe ser probado por los empresarios y las empresas en general.
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